jueves, 2 de agosto de 2012

ARETÉ


Término griego (GD0JZ, areté) que procede del comparativo del adjetivo agathós, «bueno».

Significa, originariamente, «excelencia o perfección de las personas o las cosas». En este sentido, los griegos de la época de Homero y de Hesíodo, y hasta el siglo IV a.C., hablaban de la areté como de una fuerza o una capacidad: el vigor y la salud son la areté del cuerpo, la sagacidad, la inteligencia y la previsión son areté del espíritu. Posteriormente, y debido a la influencia de Aristóteles, este término ha pasado a traducirse habitualmente por virtud.

La areté en Homero va ligada al valor en el combate y a la gloria militar. El hombre que posee areté es aquél que es digno de admiración y honor y, aunque quien poseía areté era agathós (bueno), este concepto carecía todavía de valor moral. En la época de Solón, la areté se vincula con la ley y su cumplimento. Más adelante, vendrá a significar la excelencia o capacidad de cualquier cosa, persona o instrumento, para llevar a cabo la función a la que es destinado. De esta manera, podrá hablarse de la areté de un artesano, como sinónimo de experto en su quehacer. En la época de los sofistas se considerará que para ser un buen ciudadano se requerían aptitudes políticas adecuadas, que ya no son solamente las relacionadas con el combate o con la antigua noción de la época homérica. Por ello, los sofistas se declaran maestros de areté, en el sentido de maestros para la convivencia en la polis.
 _________________________________________
Diccionario de filosofía en CD-ROM. Copyright © 1996. Empresa Editorial Herder S.A., Barcelona.
Prof. Lic. Claudio Andrés Godoy

No hay comentarios:

Publicar un comentario